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El joven, de 22 años, una mujer cercana a él y el ex cuñado de ella quedaron comprometidos por tener un kilo y medio de cocaína y marihuana. En un domicilio escondían la droga adentro de un pañal.

Policías federales desarticularon el viernes por la tarde y la noche una red de venta de drogas al mejor estilo narcomenudeo en el Este provincial.

Producto de las medidas que se desarrollaron, principalmente en el barrio Villa Obrero de Palmira, dos hombres y una mujer quedaron detenidos a disposición de la Justicia federal por comercialización de estupefacientes, debido a que incautaron un kilo y medio de cocaína fraccionada y marihuana, en menor medida.

La investigación, que se inició hace algunas semanas, tuvo desde el comienzo algunos condimentos atractivos para los pesquisas: uno de los denunciados, que terminó entre los capturados, fue hasta el año pasado el arquero titular del Club Atlético Palmira, identificado por las fuentes consultadas por El Sol como Matías Solis.

Al parecer, este joven nacido el 19 de enero de 1998, mantenía una relación cercana con la fémina apresada, Daniela Ruth Torres (29), y se los marcó como los principales vendedores de los estupefacientes en pequeñas cantidades en un "quiosquito" ubicado sobre calle Esteban Popon.

Allí los policías incautaron un paquete de papel glacé, un par de teléfonos celulares, 253 gramos de cocaína en un nilon negro, otros 305 gramos en el interior de un tupper, 3 gramos de esa misma droga tirados adentro de un placard y 3.600 pesos en efectivo.

En otra propiedad allanada el viernes, situada sobre calle San José, fue apresado el tercer sospechoso, ex cuñado de Torres, identificado por las fuentes como Marcelo Isaías Giménez, también de 29 años.


En esa morada los policías dieron con 784 gramos de cocaína en una bolsa de nilon negro, 30 gramos de esa drogas en cuatro envoltorios que escondían en el interior de un pañal, 60 gramos de marihuana y una balanza de precisión. Además, incautaron 1050 pesos que, se sospecha, serían producto de la comercialización de los estupefacientes.

Lo cierto es que la pesquisa y los allanamientos, desarrollados por la Brigada local, junto con la Unidad de Inteligencia Criminal II -también colaboró el Gabinete Científico Mendoza de Policía Federal-, mencionaba que en dos domicilios de Palmira se vendían drogas "a toda hora", como se tipifica en las denuncias.

Con el trabajo de la fiscal federal Fernando Alcaraz, se comenzaron los trabajos en el barrio llamado Villa Obrero de Palmira. Marcaron los domicilios del cruce de calles Esteban Popon y San José e identificaron a los sospechosos.

Más allá de que la denuncia inicial no lo comprometía, el primero en ser reconocido fue quien era arquero de Palmira, quien mantenía contacto estrecho con Daniela Torres, una joven madre y viuda. Allí, detallaron los pesquisas, la mujer vendía la droga con Solis, determinaron.

Con el correr de la investigación, vieron que uno de los vendedores de la droga salía de uno de los domicilios y realizaba los típicos pase de manos de dinero y drogas "en el medio de la calle". Lo marcaron gracias a un tatuaje de una estrella en su mano derecha: se trataba de Solis, agregaron los detectives.

Así las cosas, los tres sospechosos quedaron marcados y fueron detenidos por tenencia de drogas con fines de comercialización. La instrucción quedó en el Juzgado Federal Nº3, a cargo de Marcelo Garnica.

Fuente: El soldiario