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Este sábado Omar de Marchi, precandidato a gobernador por Cambia Mendoza, trajo al Este su propuesta de gobierno. Recorrió las calles y dialogó con los vecinos de los departamentos de Junín y Rivadavia.

El presidente del PRO en Mendoza se tomó el tiempo para hacer un recorrido de temas de coyuntura. Por un lado, aseguró que fue parte de la mesa de diálogo para que el Partido Demócrata se sumara nuevamente a la alianza de Cambia Mendoza, asegurando que este partido tiene referencias históricas y que son parte de los fundadores por el 2015.

Destacó tres ejes fundamentales en los que se basará su gobierno, en caso de ser elegido: “Tres motores con los que hay que encender la Mendoza que se viene. El primero tiene que ver con el hábitat que es mucho más que la vivienda, el segundo tiene que ver con la educación pública y el tercero es el desarrollo económico para generar empleo”.

Se mostró crítico sobre el sistema de vivienda actual. Destacó que tiene que haber, por un lado, vivienda social para los sectores más vulnerables que se encuentran excluidos. Pero también debe existir para los sectores medios, una política hipotecaria que derive recursos al subsidio de tasas de la banca privada para financiar construcción y compra: “Si yo fuese gobernador replantearía todo el sistema de vivienda de la provincia. Hoy el IPV tiene entre 500 y 700 empleados, a su vez hay 18 departamentos con sus direcciones de Viviendas. Hay una superestructura pública muy costosa y se han hecho menos de 3 mil viviendas en cuatro años. Si se saca el costo del funcionamiento del sistema con el resultado, dará un número muy negativo”.

Con respecto a la educación defendió el ítem aula como una herramienta que ayudó a ordenar pero que debe ser mejorada: “Es una medida que sirvió para ordenar un sistema pero a nadie se le puede ocurrir que puede ser el corazón transformador de un sistema educativo. No lo minimizo, lo voy a mantener, pero también hay que poner la lupa porque es cierto que los sueldos en la docencia son bajos. De esta manera, los docentes van a trabajar con enfermedades complejas, en condiciones que ni el propio director General de Escuelas iría”.

Además, afirmó que el ítem aula resulta estigmatizante ya que la Salud, la Justicia y los empleados políticos en la Legislatura no lo poseen. “Pareciera que el problema del ausentismo es de los docentes y el resto son todos joyitas. No es así. Debería haber una medida más genérica en el sistema público”, expresó.

Contraponiéndose a adversario Rodolfo Suárez –quien se presenta como la continuidad de Cornejo-, aseguró él que buscará innovar: “Soy la continuidad con el cambio que hay que a hacer. Hay que continuar haciendo las cosas buenas que ha hecho el gobernador y hay que producir cambios en lo que no se ha hecho bien. Sobre todo hay que animarse a innovar. Confío mucho en la voluntad de la gente y que nos acompañe.

Por último, se alejó de las decisiones de Macri y de la negociación que lleva adelante con el radicalismo sobre la fórmula presidencial. "La relación institucional de Macri en la provincia, la tiene el gobernador Cornejo", sentenció.

Por redacción.