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La vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner lanzó una dura carta contra el presidente Alberto Fernández en la que marcó diferencias con la gestión económica, calificó al resultado de las elecciones como una "catástrofe política" y advirtió sobre operaciones de prensa que parten desde "el entorno presidencial".

En la misiva que fue publicada en su página web y difundida a través de sus redes sociales, la mandataria remarcó que mantuvo con el jefe de Estado 19 reuniones de trabajo en la Residencia de Olivos.

"Nos vemos allí y no en la Casa Rosada a propuesta mía y con la intención de evitar cualquier tipo de especulación y operación mediática de desgaste institucional", aclaró luego de sostener que "no es mentirosa ni mucho menos hipócrita".

En 18 de esos encuentros Fernández de Kirchner contó que propuso dialogar sobre "la delicada situación social" que se traduce en "atraso salarial, descontrol de precios -especialmente en alimentos y remedios- y falta de trabajo" aunque sin desconocer el impacto "de las dos pandemias", en referencia a la del macrismo y la sanitaria global.

En ese sentido, también reveló que le señaló al máximo mandatario "la falta de efectividad en distintas áreas de gobierno".

"También señalé que creía que se estaba llevando a cabo una política de ajuste fiscal equivocada que estaba impactando negativamente en la actividad económica y, por lo tanto, en el conjunto de la sociedad y que, indudablemente, esto iba a tener consecuencias electorales", expresó y añadió, en un tono más incisivo, que: "No lo dije una vez… me cansé de decirlo… y no sólo al Presidente de la Nación".

La respuesta que recibió a sus reclamos y visiones coyunturales fue "siempre que no era así, que estaba equivocada" y que el triunfo en las elecciones PASO estaba garantizado.

"Mi respuesta, invariablemente, era “no leo encuestas… leo economía y política y trato de ver la realidad”. Una realidad que me indicaba que en el año 2015 perdimos las elecciones presidenciales en segunda vuelta y por escasa diferencia, con el mayor salario en dólares de Latinoamérica -que representaba más del doble del salario actual-, con una inflación que era menos de la mitad que la actual y con un candidato, Mauricio Macri, que decía que no le iba a sacar a nadie lo que ya tenía, sino que sólo iban a cambiar las cosas que estaban mal", declaró.

La expresidenta sostuvo que pensaba que los sufragios serían adversos, lo cual se traducía en un temor que le comunicaba a "muchos compañeros y muchas compañeras" del movimiento.

Los resultados del pasado domingo fueron considerados por Fernández de Kirchner como "una derrota electoral en elecciones legislativas sin precedentes".

"Las operaciones son permanentes y, finalmente, sólo terminan desgastando al gobierno. Es increíble que no lo adviertan. Es una pena tanto daño autoinfligido", reflexionó.

"Confío, sinceramente, que con la misma fuerza y convicción que enfrentó la pandemia, el Presidente no solamente va a relanzar su gobierno, sino que se va a sentar con su Ministro de Economía para mirar los números del presupuesto", expresó.

"Cuando tomé la decisión, y lo hago en la primera persona del singular porque fue realmente así, de proponer a Alberto Fernández como candidato a Presidente de todos los argentinos y las argentinas, lo hice con la convicción de que era lo mejor para mi Patria. Sólo le pido al Presidente que honre aquella decisión… pero por sobre todas las cosas, tomando sus palabras y convicciones también, lo que es más importante que nada: que honre la voluntad del pueblo argentino", concluyó.

Por redacción