The Police uses water canons during a protest against the G-20 summit in Hamburg, northern Germany, Thursday, July 6, 2017. The leaders of the group of 20 meet July 7 and 8. (AP Photo/Michael Probst)
TAF

Bajo el lema "Bienvenidos al infierno" miles de personas marcharon en contra de la cumbre que se llevará a cabo el viernes y sábado en la ciudad portuaria de Hamburgo, que desde el martes se preparó para un blindaje de seguridad extremo.

Mientras los líderes de los países del G20 llegaban este jueves a la ciudad para la cumbre, la Policía alemana reprimió a grupos de manifestantes, que esperaban recibir a los dirigentes mundiales bajo la consigna de "Bienvenidos al infierno" y "Golpeen al G20″.

Con camiones hidrantes, gases y bastones, la Policía corrió por las calles del centro de Hamburgo, una coqueta ciudad portuaria del norte alemán, a manifestantes que respondieron, en algunos casos, lanzando piedras, botellas y bengalas, según mostró la cadena de noticias CNN.

Según mostró la televisión internacional, la columna de manifestantes intentó avanzar sobre el corazón del centro de Hamburgo, donde la Policía cerró un perímetro de seguridad con miles de oficiales.

Cuando las organizaciones críticas a la cumbre del G20 llegaron al perímetro y trataron de superarlo, la Policía comenzó a reprimir.

A lo largo de esta semana, pero especialmente este jueves, con la llegada de los líderes mundiales, entre ellos el estadounidense Donald Trump, el ruso Vladimir Putin, el chino Xi Jinping y Mauricio Macri, que protagonizarán la cumbre del G20 el viernes y el sábado, alrededor de 20.000 policías con vehículos blindados, helicópteros y drones convirtieron la apacible ciudad de Hamburgo en una citadela blindada.

Las medidas de seguridad implican la mayor operación policial en la historia reciente de Alemania que, además, contará con la ayuda de fuerzas especiales de Países Bajos y Austria.
Las distintas manifestaciones contra la cumbre de G20.

Hamburgo está envuelta en un clima de tensión y protestas que, durante toda esta semana, fue sede de manifestaciones de activistas, artistas y agrupaciones de izquierda, así como algunos radicalizados, por lo que el gobierno alemán tomó altas medidas de seguridad.

Hay más de veinte manifestaciones de diversos signos convocadas para estos días en esa ciudad, por lo que las fuerzas de seguridad han desplegado un dispositivo integrado por unos 19.000 agentes para evitar incidentes y ante la alarma terrorista que rige de forma general en todo el país.

La jornada de este jueves, que marcará el fin de una semana llena de protestas, performances artísticas y hasta un concierto masivo de música pop, comenzó con un desfile de cientos de personas, bañados en arcilla gris, al estilo de la serie estadounidense The Waslking Dead.

Se espera que hasta 100 mil manifestantes se congreguen en las calles de la ciudad alemana en la marcha anticapitalista "Bienvenidos al infierno" que tendrá lugar antes y durante la reunión del G20.

El núcleo de esos grupos es la casa ocupada "Rote Flora" (Flora Roja) que se encuentra a escasa distancia del centro de congresos donde se desarrollará la cumbre, recinto que ha quedado dentro de la amplia zona ciudadana donde rige la prohibición de manifestarse, consignó la agencia de noticias EFE.

En tanto, este jueves un concesionario de automóviles fue incendiado. La Policía alemana que investiga el hecho que afectó a diez autos de marca Porsche, sospecha que se trata de una acción de activistas contra la cumbre del G20.

Las fuerzas de seguridad recogieron pistas en el lugar de los hechos, donde se encontraron restos de material incendiario junto a los vehículos.

El miércoles, una iniciativa similar había llamado a los "ciudadanos grises y apagados" a despertarse y pedir por un mundo más justo.

Por Redacción