Durante la mañana de este jueves no laborable, los comerciantes del casco céntrico de San Martín abrieron sus puertas como día normal, esperanzados de hacer una diferencia en sus ventas y teniendo en cuenta la ola del fin de semana largo. Si bien la administración pública, los bancos y las escuelas estuvieron cerradas, hubo un importante movimiento durante las primeras horas y esperan que se repita en la tarde.
Muchos consumidores aprovecharon la oportunidad para realizar algunas compras de semana santa y algunos de ellos se encontraron satisfechos de haber encontrado estacionamiento cerca del lugar donde iban. Recordemos que mañana viernes, en su mayoría, las puertas de los comercios estarán cerradas y que habrá que esperar hasta el sábado para comprar lo que faltó para la comida familiar del domingo.
Por redacción.
