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Gloria André y María Paula Marisi forman parte del juicio contra Raúl Daniel Bressi. El viernes se vivieron momentos de tensión en el debate y policías federales protegen sus movimientos y domicilios.

Tenía el rostro desencajado. Estaba fuera de sí. Nervioso y agresivo. Amenazó e insultó a la fiscal de Cámara y a la presidenta del tribunal federal que lidera un nuevo juicio en su contra y tuvo que ser retirado de la sala. La agresión del narco fue analizada por los magistrados porque no tenían antecedentes de sufrirlas personalmente en un debate de estas características y, ante la gravedad de las frases que expresó, policías federales custodian las casas y sus movimientos desde el fin de semana.

Raúl Daniel Bressi Escalante tiene 61 años y es un jefe narco que pasa sus días en la cárcel de La Pampa, condenado a 14 años de prisión por la llamada Operación Vendimia, que permitió en el 2018 el secuestro de 825 kilos de marihuana en una casa de Los Corralitos, Guaymallén.

Por estos días, está en el banquillo de los Tribunales Federales de la provincia por otra megaincautación de esa droga que venía a Mendoza: más de dos toneladas.

Bressi mantenía contactos con diversos hombres vinculados al narcotráfico mientras se encontraba en prisión, y la fiscal de Cámara María Gloria André solicitó durante los alegatos de las partes que sea condenado a 22 años de cárcel como organizador de transporte de estupefacientes agravado por haber intervenido en el hecho 3 o más personas.

Mientras la representante del Ministerio Público terminaba de argumentar toda su exposición, Bressi “se sacó” frente a los presentes.

De acuerdo con fuentes judiciales, además de una batería de insultos, lanzó frases como “no vas a vivir tranquila” y “vas a vivir con consigna policial toda tu vida”, lo que provocó que sea retirado por el personal del Servicio Penitenciario Federal.

Ante la gravedad de la situación, por otras denuncias que venía recibiendo por parte de Bressi la presidenta del tribunal, María Paula Marisi, en las últimas horas se ordenaron consignas policiales en sus domicilios y también en el ámbito de trabajo.

Complicado

El debate contra Bressi y otros personajes del mundo de las drogas mendocino, entre ellos su hijo Matías Rodrigo, comenzó el 3 de junio. Desde ese tiempo se sabía que la situación procesal del jefe narco era complicada y arriesgaba una dura pena por la cantidad de hechos que le vienen endilgando los investigadores de la Policía contra el Narcotráfico (PCN) de Mendoza y también la Gendarmería, encargadas de investigaciones desde hace más de cinco años.

Para las fuentes, al estar frente a una potencial condena de más de 20 años de cárcel, que lo dejaría, prácticamente, de por vida en la cárcel, Bressi comenzó a atacar a los magistrados.

Las amenazas fueron escuchadas por todos los presentes en la sala y, por eso, se tomó la decisión de proteger la integridad física de las magistradas, quienes ya habían actuado como acusadora e integrante del Tribunal Oral Federal Nº1 de Mendoza, respectivamente, en el primer juicio oral que se desarrolló contra el jefe narco en junio del 2018.

Así las cosas, tomó mayor relevancia lo que sucederá en el edificio de calles Pedro Molina y España cuando se conozca el viernes 12 el veredicto de Marisi y las juezas que completan el tribunal, Gretel Diamante (San Luis) y Eliana Rattá (San Juan).

Es una incógnita si Bressi estará presente o si seguirá el final del proceso por videoconferencia.

Para las fuentes consultadas, “no sería bueno que presencie la lectura de la parte resolutiva de la sentencia”, a pesar de que el narcotraficante solicitó presenciar cada una de las audiencias desde el 3 de junio y por eso fue traído desde la cárcel federal IV de La Pampa.

Todas las causas

Bressi Escalante fue sentenciado a 14 años de cárcel el 13 de junio del 2018 por liderar una banda que acopió 825 kilos de marihuana compactada en una casa de calles Tabanera y Ferrari, de Los Corralitos, Guaymallén. La Policía contra el Narcotráfico lideró la investigación que permitió su captura y la de cinco personas más el 3 de marzo del 2017. Fue bautizada Operativo Vendimia.

Según los trabajos que realizaron los pesquisas, Bressi era quien lideraba todos los movimientos de la banda y coordinaba el traslado para ocultar los panes en el citado domicilio. Del proceso surgió que tenía contactos con el mundo narco de Paraguay y Chile, y la idea de la organización era que parte de ese cargamento sea trasladado y comercializado en el vecino país, donde triplica su valor.

Además de Bressi, fueron hallados culpables Oscar Javier Santarelli, Heriberto Barrios Gómez y Miguel Ángel Fernández, a 7 años de cárcel, y un matrimonio conformado por Johana Navarro y Roberto Peralta, quienes recibieron 4 años y medio de cárcel por acopiar los ladrillos en su hogar a cambio de una importante suma de dinero.

Mientras Bressi se encontraba en la cárcel, en el 2018 le iniciaron otra causa luego de que el Juzgado Federal Nº2 de San Juan enviara una compulsa al detectar en una instrucción que varios mendocinos realizaban maniobras vinculadas con el narcotráfico.

La Gendarmería se hizo cargo de la investigación y se iniciaron escuchas telefónicas. Esto permitió saber que se comunicaba con distintas personas y a una le propuso recibir una carga de drogas que venía desde el norte del país.

En las charlas le indicaba que tenía que comunicarse con su hijo, Matías Bressi, debido a que era el encargado en Mendoza de ejecutar todas las órdenes que daba, y también con un sujeto apodado Riky.

Mientras “espiaban” los teléfonos, los pesquisas supieron que había partido un cargamento con marihuana desde Formosa y que el destino final era Mendoza. Los panes venían ocultos en un camión cargado con arroz a granel y que tenía previsto terminar su recorrido el 14 de febrero del 2020.

Antes de llegar a destino, el pesado rodado sufrió un desperfecto mecánico en Chaco, a 80 kilómetros de Resistencia. Una vez reparado, el vehículo continuó la marcha y supieron que era conducido por un hombre identificado como Cristian Darío Pizarro. Al mismo tiempo, Leonardo Riky Varo circulaba en un auto a pocos metros actuando como puntero.

Los investigadores supieron que el camión con la droga pasaría por Santiago del Estero y que podría transitar por Córdoba, San Luis y Mendoza, por lo que se profundizaron las pesquisas y diversas comisiones de la Gendarmería comenzaron a trabajar en las rutas de esas provincias.

El 17 de febrero, el camión Mercedes Benz fue detectado por las celdas de teléfonos celulares en la localidad de Gutemberg, en Córdoba, y reinó la preocupación. Sufrió un nuevo desperfecto mecánico y por eso decidieron cortarle el paso. Al abrir las compuertas, debajo de las lonas que contenían arroz a granel, los investigadores encontraron los bultos rectangulares envueltos en cinta adhesiva ocre. En total, trasladaba 2.474 ladrillos que hicieron un peso total de 2.284 kilogramos.

Así las cosas, la fiscal André solicitó 22 años de cárcel para Bressi Escalante durante los alegatos del viernes (los delitos que le endilgan tienen un máximo de 26 años). Para Leonardo Varo pidió 10 años; para el camionero Pizarro, 7 años, y para el hijo del jefe, Matías Bressi, 5 años y medio de encierro.

El caso tiene otro procesado, quien fue detectado hablando con el líder narco, pero la fiscal André entendió que correspondía la absolución por la duda por falta de pruebas.

Fuente: El Sol